Hace años escogí dejar atrás la ingeniería de telecomunicaciones, un área que me apasiona y que me permitía estar siempre atento para los nuevos avances tecnológicos. Pero era algo que no me completaba, que dejaba algunos huecos en mi personalidad, no permitiendo que yo creciera personal y profesionalmente. Así pues decidí dedicarme a la fotografía, tal y como mi padre había hecho.

Es un trabajo que conozco bien, desde de los diez años acompañaba asiduamente a mi padre a los reportajes. Le observaba trabajar, estresarse, conseguir sus objetivos, rendirse, vencer… fue un muy buen aprendizaje, pero en contadas ocasiones le vi disfrutar con la fotografía. Y es este hecho, el que me hizo tardar tanto en averiguar lo mucho que me apasionaba trabajar en este medio, pues al principio, era solo una afición.

Cuando lo retomé como profesión, seguía a pies juntillas las enseñanzas de mi maestro, pero él me permitió la libertad para que me desarrollase a mi manera, con mis propias ideas, aunque siempre bajo su supervisión, a veces con su beneplácito, otras muchas con su desaprobación. Aunque son estas últimas las que más me han hecho crecer como fotógrafo, pues me han permitido crear mi propio estilo, y saber que jamás debo bajar la guardia y dejar de aprender, pues el día que dejamos de aprender, es el día que morimos.

Otra parte que me encanta de mi profesión, es que mis clientes me llaman en el momento en el que son felices, cuando quieren guardar un recuerdo para el resto de sus vidas. Es en ese instante, rodeado de felicidad, en el que se ha de desarrollar mi trabajo. ¿No es el mejor trabajo del mundo?

Para ser mejor en mi profesión decidí elaborar un decálogo de trabajo, para poder ofrecer el mejor servicio y no parar de crecer, como fotógrafo y como persona.

Este es mi decálogo:

1) Hacer del momento, un recuerdo inolvidable.

2) Todo tiene un lado hermoso. Encontrarlo es nuestra meta.

3) Hay cosas que solo ocurren una vez. Estemos siempre atentos para captarlo.

4) Cada uno tiene su propia historia. Dos cosas iguales pueden ser muy diferentes.

5) Cuanto más tiempo pasa, las fotografías importantes, se vuelven aún más importantes.

6) Evolucionar nos ha hecho llegar donde hoy estamos. No nos anclemos en el pasado, busquemos nuevas formas de expresarnos.

7) Trabajar siempre con cariño y dedicación, si no se puede: Descansar.

8 ) Disfrutar de nuestro trabajo, siempre.

9) El cliente siempre tiene una opinión, una idea, una imagen que desea: Escuchémoslo.

10) En todo reportaje, buscar una fotografía especial y diferente de los anteriores reportajes.